Se disputó
la final de la Europa League en el estadio Nacional de Varsovia, en Polonia.
Fue un partido trepidante, donde pasamos de la locura de la primera mitad a la
calma tensa de la segunda parte donde el Sevilla se rehízo y consiguió la
victoria.
El partido
empezó con mucho ritmo, con el Sevilla creando mucho peligro, aunque el primero
en golpear fue el equipo ucraniano. En el minuto 6, Kalinic peinó el balón para
Matheus que entró en el área, puso el centro y, el propio Kalinic, de cabeza,
puso el 1-0 en el marcador. El Sevilla se repuso perfectamente, siguió haciendo
su juego y llegando cada vez con más peligro. En el minuto 20 Reyes disparó
desde la frontal y el balón se estrelló en el lateral de la red. Tan sólo
cuatro minutos después, centro al segundo palo donde cabeceó Krychowiak y
despejó muy bien Boyko. Era cuestión de minutos que llegase el gol sevillista y
así fue, en el minuto 27, Banega puso el centro desde la izquierda, Bacca se la
dejó de cara a Krychowiak que, con un disparo raso desde el punto de penalti,
puso el 1-1 en el electrónico. Con el Dnipro bastante tocado, el Sevilla era
dueño y señor del encuentro, aprovechando la situación para ponerse por delante
en el marcador. En el minuto 31 Reyes metió un balón perfecto en profundidad
para Bacca que recortó a Boyko y marcó a placer el 1-2. A partir de este gol,
el conjunto andaluz se empezó a relajar y, poco a poco, el Dnipro fue yéndose
arriba. En el minuto 37 Rotan se sacó un gran disparo con rosca desde la
frontal y despejó con una gran estirada Rico, sacando el balón en la mismísima
escuadra. Ese dominio ucraniano se hizo finalmente efectivo, al borde del
descanso, en el minuto 43, Rotan lanzó una falta directa por encima de la
barrera que acabó en el fondo de las mallas, poniendo el 2-2 en el electrónico.
Tras el
descanso, ambos equipos salieron más relajados, con menos ritmo y normalizando
el partido. Los minutos iban pasando, el Sevilla legaba más y dando una mayor
sensación de peligro, mientras el Dnipro sólo conseguía sacar algún disparo
desde la frontal que no llegaba a inquietar a Rico. En el minuto 72 Vitolo
metió el pase entre líneas dentro del área para Bacca y, éste, con un disparo
cruzado puso el 2-3 definitivo en el marcador. Ya en el minuto 79, el Sevilla
puso un centro con mucho peligro al área que remató de cabeza Bacca y sacó a
bocajarro Boyko, mandando el balón a córner.
Martin
Atkinson señaló el final del encuentro, el Sevilla ganó su cuarta Copa de la
UEFA, la primera con el formato de
Europa League, logrando a su vez la clasificación para la próxima Champions
League, en la cual habrá cinco equipos españoles, todo ello lo logró ante un
digno Dnipro que lo intentó pero no pudo con la gran calidad individual
sevillista.
ALINEACIONES
Dnipro: Boyko, Matos, Cheberyachko, Douglas,
Fedeckyj, Fedorchuk (Bezus 67´), Kankava (Skakhov 84´), Konopljanka, Rotan,
Matheus y Kalinic (Seleznyov 77´)
Sevilla: Sergio Rico, Tremoulinas,
Kolodziejczak, Carriço, Aleix Vidal, Krychowiak, Mbia, Vitolo, Banega (Iborra
88´), Reyes (Coke 57´) y Bacca (Gameiro 81´)
AMONESTACIONES
Dnipro: Vieron la tarjeta amarilla Matos, Bezus,
Kankava, Rotan y Kalinic
Sevilla: Vieron la tarjeta amarilla Carriço,
Krychowiak y Bacca
GOLES
Dnipro: Kalinic y Rotan
Sevilla: 2 Bacca y Krychowiak
DESTACADOS DEL PARTIDO
MVP: Krychowiak, como casi siempre, estuvo
inmenso, trabajando muy bien en zona defensiva, uniéndose al ataque con cabeza
y marcando el primer gol sevillista
Vaya Día: Matheus dio el susto de la final,
tras un golpe cabeza con cabeza, a los pocos minutos, cayó desplomado sobre el
césped, después recuperó la conciencia y acabó en el hospital con una fractura
de nariz, sin correr peligro su vida
Imperial: Bacca fue el héroe de la final, pese
a que empezó el partido frío y sin entrar en juego, acabando dando la copa a su
equipo, con una asistencia y dos goles